Los sectores de más escasos recursos generalmente tienden a disponer de iluminación pública insuficiente. Conscientes de este problema es que nuestra propuesta apunta directamente a una drástica reducción de los costos de implementación y costo cero en el gasto de electricidad. Su autonomía le permite funcionar incluso durante las interrupciones del servicio eléctrico y mantener iluminación mientras el servicio es repuesto. Las emergencias producto de catástrofes durante la noche resultan menos críticas si se dispone de iluminación durante y luego de ocurrido el evento.